domingo, 20 de marzo de 2016

Tales vs La gran Pirámide

Muy buenas.

Hoy vamos a hablar de un hito en la historia de la ciencia, en el que nació el famosísimo Teorema de Tales. Esta historia se sitúa en el siglo VI a.C. en Egipto. El matemático griego Tales de Mileto (620-540 a.C) trató de calcular la altura de la Gran Pirámide de Guiza con increíble ingenio y utilizando como instrumento un palo. 

Existen varias posibilidades y dos son los relatos fundamentales que narran cómo pudo hacerlo, aunque todas utilizan el mismo principio matemático. Comenzamos con el que se piensa que es el más probable. Así es como Tales calculó la altura de la pirámide, según el relato de Plutarco (siglo II a.C.).

Gran Pirámide de Guiza.

Como os imagináis, en aquella época no podía medirse la altura de una pirámide directamente, como lo haríamos hoy, así que Tales tuvo que ingeniárselas de algún modo. Para ello no utilizó herramienta alguna, salvo un palo y algún dispositivo para medir. La idea era clavar el palo en el suelo y medir la longitud de la sombra que generaba el palo y la pirámide. Pero no vale cualquier sombra, sino la que proyecte una sombra perpendicular a uno de los lados de la pirámide, es decir, al mediodía. Además, para que haya sombra los rayos de sol deben ser más inclinados que la de las caras de la pirámides, así que solo es posible en ciertos meses del año: desde octubre hasta febrero. Comentar que la Gran Pirámide está construida de manera que cada una de sus caras está alineada con cada uno de los puntos cardinales, esto hace posible la perpendicularidad de proyección que buscábamos.



Tales pensó que había cierta relación entre la sombras proyectadas y las alturas del palo y la pirámide, ya que forman triángulos con cierta relación. 


Y de esta expresión, lo único desconocido es la altura de la pirámide. Despejándola, obtenemos la solución al enigma. El único problema (aunque pequeño) es calcular la longitud de las sombras. La sombra proyectada por el palo es fácil de medir, y la de la pirámide es simplemente la distancia desde la punta de la sombra hasta la base de la pirámide más la mitad del lado de la pirámide. 

Era importante que el sol estuviese perpendicular a una de las caras, porque la sombra proyectada es fácilmente medible, como ya hemos comentado. De otra manera, la sombra estaría ladeada y no hubiera sido posible medirla.

A la expresión utilizada es la que hoy llamamos Teorema de Tales, que viene a ser enunciado de una manera sencilla: En dos triángulos semejantes, los lados son proporcionales entre sí. Y dos triángulos son semejantes sí, si sus ángulos son iguales. En nuestro caso, existe un ángulo recto, formado por el palo y la pirámide y el suelo y los otros dos deben ser iguales, ya que son consecuencia de la proyección del sol.



Con una idea similar a esta, posteriormente Diógenes Laercio (siglo II d.C.), narra el relato de cómo Tales pudo calcular la altura de la Gran Pirámide, en el momento en el que la longitud de la sombra de un hombre es igual a la altura del propio hombre. Es decir, habrá ciertos momentos del año (en el mediodía también, porque seguimos queriendo que la sombra sea perpendicular a una de las caras) en que la sombra proyectada de un cuerpo será en longitud, exactamente igual a la altura del cuerpo. En ese mismo día, cuando veamos que la longitud de nuestra sombra mide exactamente igual a nuestra altura, entonces la altura de la pirámide será la longitud de su sombra, que mediríamos como antes. En este caso el problema principal reside en averiguar qué día ocurre que la sombra proyectada tiene la misma longitud que el cuerpo. Se puede suponer que Tales, como buen astrónomo que era, sabía que días del año eran esos, aunque esto no puede ser sabido hoy.


Ciertamente, la primera idea parece más factible, ya que se puede llevar a cabo cualquier día en un rango de 4 meses. Sin embargo en este caso también estamos suponiendo que Tales sabía que al mediodía, la sombra proyectada de la pirámide es perpendicular a una de las caras. ¿Habría una tercera forma que él pudiera lleva a cabo para resolver el problema sin saber nada de eso? Pues sí que la hay. Fijate en la siguiente figura:


En este método alternativo, habría que esperar a que la sombra fuera tal que la imagen, lo que podría ocurrir cualquier día. En este caso nos interesa saber la distancia AE y seguro que serás capaz de plantear la siguiente expresión, utilizando el teorema de Tales:


Como lo conocemos todo menos la distancia AE, podemos calcularla fácilmente con la anterior expresión. Pero hay un problema: en teoría no sabemos donde este el punto C, porque todo es sombra en ese lado de la pirámide. Tenemos que averiguarlo previamente, pero con un poco de ingenio todo se puede hacer:



Si colocamos un palo recto en A, observamos con un solo ojo a través de él y hacemos coincidir la punta de la pirámide con el palo, podremos saber dónde está el punto C situado. Y ahora sí, ya podemos saber la distancia AE. 

Una vez que tenemos AE, volvemos a plantear el teorema de Tales de la manera siguiente:



Donde la altura de la pirámide es EF. Problema resuelto otra vez. En en caso cualquier día, en el que se proyecte sombra, sería posible calcular la altura de la pirámide.


Hay más maneras averiguar la altura de la pirámide, pero así es como se piensa que ocurrió. Espero que te haya resultado interesante. Para cualquier pregunta, deja un comentario abajo.

Bye bye.


martes, 19 de enero de 2016

Cuidado con el vídeo de la manzana

Muy buenas.

Hoy os quiero hablar sobre la seguridad y legislación alimentaria, un tema que es a la vez importante y aburrido. Así que me voy a apoyar en un vídeo que se hecho viral hace poco.

A muchos os sonará el vídeo “de la manzana”, en el que aparece un señor raspando un par de manzanas y extrayendo una sustancia de color gris, parecido a una cera. Los que no lo hayáis visto podéis buscarlo simplemente escribiendo “vídeo de la manzana” en Google (he decidido no ponerlo en mi blog). Ya lleva más de 18 millones de reproducciones en Facebook y ha sido compartido más de 640.000 veces.

Haciendo un pequeño resumen del vídeo, este hombre critica, censura y concluye que esa sustancia que desprende de la manzana, es “veneno”. Pues bien, vamos a investigar en primer lugar, qué es esa sustancia y más tarde, si es “veneno” o no.

Para el primer paso recurriremos a la legislación europea. En mi caso me he apoyado en la base de datos www.legalimentaria.es, que es muy sencilla y rápida de usar, aunque se necesita acceso. También se podría hacer en Google, pero es más laborioso.

En el Real Decreto 142/2002, de 1 de febrero, encontramos que tipos de sustancias son las que se utilizan para recubrir manzanas. En la página 130 de este artículo encontramos que las manzanas solo pueden estar recubiertas por cera de abejas, cera candelilla, cera carnauba o de Shellac.

Ahora vamos a identificar que posibles sustancias podría ser la sustancia que se desprende de la manzana del video y la única forma es atendiendo a la apariencia. En el Real Decreto 1466/2009, de 18 de septiembre tenemos toda las descripciones de esos aditivos y todos los demás. Y cito textualmente:
  • Cera de abejas: trozos o láminas de grano fino y de fractura no cristalina, de color blanco amarillento (tipo blanco) o entre amarillento y marrón grisáceo (tipo amarillo).
  • Cera candelilla: Cera dura, de color marrón amarillento, entre opaca y traslúcida.
  • Cerca carnauba: Polvo o escamas de color entre marrón y amarillo pálido, o sólido duro y quebradizo de fractura resinosa.
  • Shellac blanqueado: resina granular amorfa de color blancuzco.


Según estas descripciones, la sustancia que el señor del vídeo extrae de la piel de la manzana, solo puede ser cera candelilla o cera carnauba. Así que veamos cada uno por separado si se trata de veneno o si este señor se equivoca.


Cera candelilla.

La cera candelilla proviene de la planta Euphorbia antisyphilitica o planta de cera, que es un arbusto y crece en el sur de EEUU y en México.


Euphorbia antisyphilitica
Euphorbia antisyphilitica


Como habíamos dicho antes, se trata de una cera dura, translucida y de color marrón-amarillento. Para saber si debemos considerarla como un producto tóxico, hay que leer el informe de la EFSA (European Food Safety Authority) que es el máximo organismo europeo que se encarga de elaborar informes científicos independientes, sobre cualquier tema relativo a la seguridad alimentaria (www.efsa.europa.eu). Este tipo de informes consiste en una revisión de todos las investigaciones que se han llevado a cabo. Y teniendo en cuenta  toda la información disponible, concluyen y dan un veredicto. Para la cera candelilla voy simplemente a poner la traducción de las conclusiones, para manipular lo menos posible la información:

“Considerando la estimación del consumo de cerca candelilla, usando los máximos niveles de exposición permitidos, permite al Panel concluir que el uso de la cera candelilla como aditivo alimentario, con los actuales usos autorizados, no sería un motivo de preocupación”.

La conclusión es muy clara: según la cantidad en que se usa, NO es motivo de preocupación. Por el momento el señor se va equivocando…

Cera carnauba

La cera carnauba se obtiene de las hojas de la palma Copernicia prunifera, que crece en Sudamérica.
Tiene muchas aplicaciones en la industria alimentaria, cosmética, productos para dar brillo al calzado…


Copernicia prunifera
Como habíamos dicho antes la cerca carnauba  se presenta en polvo o escamas de color entre marrón y amarillo pálido, o sólido duro y quebradizo de fractura resinosa.

El igual que antes, nos dirigimos a la página de la EFSA para averiguar si es una sustancia peligrosa. Y la EFSA dice:

“La consideración de la estimación conservadora del consumo de cera carnauba en los actuales usos autorizados indican que existe margen de seguridad suficiente, lo que permite concluir que el uso de la cerca carnauba como aditivo alimentario en los actuales usos autorizados, no sería un motivo de preocupación”.

La conclusión es igual de clara: NO es peligrosa.

Y la conclusión de este post es también clara: El mensaje de ese vídeo es FALSO.

Incluso diría más. Es positivo el recubrimiento de las frutas con estas ceras. Las manzanas, de manera natural, generan cera que rodea su cuerpo, que en la etapa de lavado de la fruta, se pierde. Por esa razón se sustituye. Éstas no sólo sirven para darle un mejor aspecto a la fruta, sino que aumenta su vida útil de consumo: la cera impide la transpiración de la manzana, disminuyendo su oxidación y por tanto, aumentando el tiempo que la fruta se mantiene fresca. Esto quiere decir, que probablemente la fruta que tendríamos en el mercado no serían tan fresca y sabrosa sin ese recubrimiento. Además la cera protege de ataque microbiano, actuando como barrera física.

En el vídeo, este señor comenta que la sustancia no es cera, porque no arde. A este comentario, hay que decir en primer lugar, que las ceras no arden, al menos las que yo conozco. ¿Conocéis alguna vela que haya explotado al encenderla? La cera se derrite, y es exactamente lo que ocurre cuando intenta prenderla. No sé si habrá ceras que si ardan, pero el caso es que no me gustaría que la cera que recubre a una manzana ardiese (no me gustan los postres inflamables. Puede ser que a este señor sí).

También dice que “en eso no se mete sanidad, ni se mete el gobierno, ni se mete nadie”. Ya hemos visto que se mete el gobierno y sanidad. Quizás este señor debería haber leído un poco más.

En uno de sus comentarios dice que “de ahora en adelante no comerá ninguna fruta y ninguna hortaliza”. Por favor no le hagáis caso, eso es lo peor que podéis hacer. No podemos creernos cualquier comentario que haga una persona, por muy gracioso y divertido que parezca y dejar de comer fruta. Qué menos que hacer un búsqueda en Internet y leer varias opiniones. Como ingeniero y técnico de los alimentos, os digo que no nos venden veneno. No todo es tan malo como nos creemos, pero tampoco nada es tan bueno como nos han hecho creer de ciertas sustancias (como la vitamina C, el bifidus, vitaminas…).

He intentado ser lo más riguroso posible basándome en la Ley vigente y en la Ciencia. He “copiado y pegado” la información para que no haya cabida a las interpretaciones. Podría haber hecho trampa y haberos dicho que esas ceras son naturales y por tanto buenas(que no siempre es así), pero no, he intentado ser lo más veraz posible. Ya depende de vosotros si creéis a tres minutos de un señor diciendo “carajo, mierda…” o a un riguroso estudio.

No me parece mal que este señor suba un vídeo, pero es escandaloso el números de veces que se ha compartido, en número de veces que se ha visionado y los comentarios de las personas. Tened cuidado con este tipo de comentarios, Internet está lleno de información falsa y aunque sea difícil de identificar, debéis contrastarla o al menos fijaros si tiene fuentes o no. La fuente de este señor es otro vídeo exactamente igual que el suyo, que a su vez, probablemente haya sido copiado de otro (y así es como la ignorancia se propaga).

El último consejo que os doy es que no os asustéis por lo extraño, porque extraño no significa malo. Y tampoco os dejéis llevar por las apariencias: que una sustancia empiece por E, no quiere decir que sea perjudicial. “E” solo es una letra, y las letras no hacen daño a nadie. Detrás de cada E-000 hay un compuesto químico que debe ser analizado para concluir si es bueno o es malo. Tampoco lo natural es mejor que lo sintético, ni lo casero o artesanal es mejor a lo industrial, tampoco lo ecológico…Lo siento, no es tan fácil, hemos de estudiar cada caso independientemente.

Así es como se hace un pequeño estudio sobre seguridad alimentaria centrándose en sustancias. Espero que os haya interesado. Si hay alguna sustancia que os preocupe, no dudéis en comentar abajo, yo lo consultaré y os diré.

Así que ya sabéis, comed muchas manzanas que son muy sanas.

Muchas gracias!




Real Decreto 1466/2009, de 18 de septiembre
Real Decreto 142/2002, de 1 de febrero
Scientific Opinion on the re-evaluation of candelilla wax (E 902) as a food additive.  EFSA Panel on Food Additives and Nutrient Sources added to Food. 2012.
Scientific Opinion on the re-evaluation of carnauba wax (E 903) as a food additive. EFSA Panel on Food Additives and Nutrient Sources added to Food. 2012.